De Aicha Bint Abu Bakr, Al-lah esté complacido con ambos, que dijo:
“De Barirah hemos conocido tres dictámenes de la Tradición del Mensajero de Allah ﷺ (Sunna): Cuando se le liberó de la esclavitud, se le dio a elegir si seguir casada o no con su marido (esclavo por entonces). Se le dio un azaque (sadaqa) de carne.
Cuando llegó el Mensajero de Allah ﷺ a casa, vio que la olla estaba sobre el fuego, así que pidió algo de comer. Se le trajo pan y un caldo de la casa. Él preguntó: ‘¿Acaso no he visto la olla con carne asándose sobre el fuego?’ Le dijeron: ‘Efectivamente, Mensajero de Allah, esa carne fue dada a Barirah como azaque (sádaqa), por eso evitamos dártela de comer’.
Él dijo: ‘Para ella es un azaque (sadaqa) y para nosotros es un regalo’. Luego añadió: ‘La lealtad es para el liberador’”.
En un otro relato que cuando ‘Aisha quiso comprar una esclava (para liberarla) cuyo nombre era Barirah, su propietaria rehusó vendérsela con la condición de que debería quedar relacionada con ellos. Cuando el Mensajero de Allah ﷺ supo de esto, se paró y se dirigió a la gente, alabó y agradeció a Dios, y luego dijo:
“¿Qué es lo que le pasa a quien impone condiciones que no están mencionadas en el Libro de Allah? No hay condición que no esté mencionada en el Libro de Allah, que no sea inválida, aún si hubiera cien condiciones como esas.
El decreto de Allah es más verdadero, las condiciones impuestas por Dios son más vinculantes, la lealtad y la fidelidad (de un esclavo) es para quien lo libera de la esclavitud”.
Aisha  narró que Barira le dijo:
«Había acordado comprar mi libertad a cambio de nueve Uqías, cada Uqía debía ser pagada anualmente, así que ayúdame.»
Aisha  le dijo: «Si tu gente acepta que sea mía tu Walá’ lo haré.» Barira se juntó con sus dueños y les informó sobre eso, pero negaron la propuesta [de ‘Aisha].
Cuando ella regresó el Mensajero de Allah  estaba sentado [en su casa]. Ella dijo: «les ofrecí eso, pero insistieron en ser ellos los que reciban el Walá’ «. El Profeta  escuchó la conversación y ‘Aisha  le informó al respecto, entonces le dijo a ‘Aisha: «Acepta con la condición de que el Walá’ sea tuyo, porque el Walá’ sólo pertenece al que ha liberado al esclavo.
Aisha  así lo hizo. Luego el Mensajero de Allah  se presentó ante la gente, y después de alabar y glorificar a Allah, dijo: «¿Qué pasa con algunas personas que ponen condiciones que no están en el Libro de Allah? Cualquier condición que no se encuentre en el Libro de Allah es nula.
Aunque sean cien condiciones, el juicio de Allah es más válido y la condición de Allah es más obligatoria. El Walá’ sólo pertenece al que ha liberado al esclavo.»
En un relato añadió:
Cómprala, ponla en libertad y deja en claro que su Walá’ es tuya.
De Ibn Umar que dijo:
El Mensajero de Allah  prohibió vender o regalar el derecho de sucesión de un esclavo liberado.
De Al-Qásim ibn Muhammad que dijo:
“Hubo
tres hadices sobre Baríra:
Aisha quiso comprarla [a Barīra] y manumitirla pero sus dueños (ahl) dijeron: “Su patronato es para nosotros”.
Aisha mencionó eso al Mensajero de Allah ﷺ y dijo:
“Si quisieras, [podrías] admitirlo como condición a favor de ellos pues el patronato pertenece solamente a quien manumite”.
[Barīra] fue manumitida y se le dio la opción
de elegir si seguir junto a su marido o separarse de él. El Mensajero de Allah ﷺ entró un día en la casa de Aisha y sobre el fuego había una olla hirviendo. Entonces pidió el almuerzo y se le trajo pan y comida [sin carne] de la comida de la casa y dijo:
“¿Acaso no estoy viendo carne?” Le dijeron:
“Claro que sí, Enviado de Dios, pero es carne dada como limosna a Baríra y que ella nos ha regalado.
Dijo [el Mensajero de Allah ﷺ]: “Esto es limosna para Barīra pero un regalo para nosotros”
عن عائشة بنت أبي بكر-رضي الله عنهما- قالت:
كانت في بريرة ثلاث سنن: خيرت على زوجها حين عتقت. وأهدي لها لحم، فدخل علي رسول الله -صلى الله عليه وسلم- والبرمة على النار، فدعا بطعام، فأتي بخبز وأدم من أدم البيت، فقال: ألم أر البرمة على النار فيها لحم؟ قالوا: بلى، يا رسول الله، ذلك لحم تصدق به على بريرة، فكرهنا أن نطعمك منه، فقال: هو عليها صدقة، وهو منها لنا هدية. وقال النبي -صلى الله عليه وسلم- فيها: إنما الولاء لمن أعتق».
وفي رواية أخرى أنه لما أرادت عَائِشَةَ -رضي الله – عنها شراء جارية اسمها بريرة رفض أهلها بيعها إلا بشرط أن يكون الولاء لهم فلما علم النبي (صلى الله عليه وسلم) قام في الناس
فحمد اللَه وأثنى عليه ثُمَ قال .:
ما بال رجال يشترطون شروطًا ليست في كتاب الله ، ما كان من شرط ليس في كتاب الله فهو باطل وإِن كان مائة شرط قضاء اللَه أحق وشرط الله أوثق وإِنما الولاء لمن أعتق
وعن عائشة – رضي الله عنها – قالت:
«جاءتني بريرة، فقالت: إني كاتبت أهلي على تسع أواق، في كل عام أوقية، فأعينيني. فقلت: إن أحب أهلك أن أعدها لهم ويكون ولاؤك لي فعلت، فذهبت بريرة إلى أهلها.
فقالت لهم: فأبوا عليها، فجاءت من عندهم، ورسول الله – صلى الله عليه وسلم – جالس. فقالت: إني قد عرضت ذلك عليهم فأبوا إلا أن يكون الولاء لهم، فسمع النبي – صلى الله عليه وسلم – فأخبرت عائشة النبي- صلى الله عليه وسلم -.
فقال: «خذيها واشترطي لهم الولاء، فإنما الولاء لمن أعتق» ففعلت عائشة، ثم قام رسول الله – صلى الله عليه وسلم – في الناس خطيبا فحمد الله وأثنى عليه.
ثم قال: «أما بعد، فما بال رجال يشترطون شروطا ليست في كتاب الله ما كان من شرط ليس في كتاب الله فهو باطل، وإن كان مائة شرط، قضاء الله أحق، وشرط الله أوثق، وإنما الولاء لمن أعتق»
زاد في رواية:
اشتريها وأعتقيها واشترطي لهم الولاء
عن ابن عمر – رضي الله عنهما -:
أن رسول الله – صلى الله عليه وسلم – نهى عن بيع الولاء، وعن هبته
عن ربيعة أنه سمع القاسم بن محمد يقول
كان في بريرة ثلاث سنن: أرادت عائشة أن تشتريها فتعتقها، فقال أهلها: ولنا الولاء، فذكرت ذلك لرسول الله صلى الله عليه وسلم، فقال: لو شئت شرطتيه لهم؛ فإنما الولاء لمن أعتق. قال: وأعتقت فخيرت في أن تقر تحت زوجها أو تفارقه. ودخل رسول الله صلى الله عليه وسلم يوما بيت عائشة وعلى النار برمة تفور، فدعا بالغداء، فأتي بخبز وأدم من أدم البيت، فقال: ألم أر لحما؟ قالوا: بلى يا رسول الله، ولكنه لحم تصدق به على بريرة، فأهدته لنا، فقال: هو صدقة عليها، وهدية لنا.